Desde nuestro origen, los inmigrantes han representado la piedra angular de los Estados Unidos, y, durante 246 años, inmigrantes de todo el mundo han hecho de este país un lugar mejor. Si bien, a menudo, es pasada por alto por muchos habitantes, la libertad sigue siendo la luz que guía a los inmigrantes. Los inmigrantes demuestran que nuestra libertad se ve reforzada por sus contribuciones de trabajo duro y que merecen un camino hacia la ciudadanía.